Lo saludable está de moda.
Lo cual tiene su cara positiva y negativa: lo bueno es que aumentó exponencialmente la disponibilidad de productos saludables y la divulgación sobre temas relacionados a la salud; lo malo es que, como toda moda, le quita solidez a las recomendaciones tildándolas de “tendencia”.
Ocurre lo mismo con elegir alimentos ecológicos o regulares.
Por eso la pregunta que nos importa es:
Los productos ecológicos: ¿merecen la pena?
Antes que nada, para evitar confusión, te cuento qué significa que un producto sea “ecológico”. Los productos ecológicos son aquellos en los que no se han empleado pesticidas de origen químico ni organismos modificados genéticamente (es decir, transgénicos). Y no está de más aclarar, que según regulación europea, los términos “bio”, “ecológico” y “orgánico” son intercambiables y significan lo mismo.
La industria alimentaria, me refiero a las caras visibles como supermercados y las invisibles como los grandes productores, se ha encargado de difundir mensajes muy confusos y de manipular las políticas públicas a su favor en relación a este tema. Te cuento un poco lo que averigüé.
Para responder a la pregunta analicé los siguientes aspectos:
- Nutricional
- Medioambiental
- Contaminantes
- Características organolépticas
Nutricional
En cuanto a lo nutricional, los estudios científicos recientes suelen demostrar que no hay diferencias tan significativas en la distribución de “macronutrientes” como proteínas o carbohidratos entre alimentos regulares y ecológicos. Las diferencias oscilan entre un 8-11%. Y en cierto modo creo que “me alivia” saber que es así, sino… ¿Qué estaríamos comiendo?
Pero sí se han encontrado diferencias en cuanto a los “micronutrientes” (técnicamente hablando, los productos del metabolismo secundario de las plantas). Te cuento dos ejemplos.
Uno: Los alimentos ecológicos tienen entre un 18-69 % más antioxidantes (como polifenoles), se observó esta diferencia en frutas más que en verduras. Una característica interesante para quienes atribuyen importancia a la ingesta de antioxidantes.
Dos: La leche ecológica contiene un 62 % más de ácidos grasos omega 3 y un 25 % menos de ácidos grasos omega 6 que la leche convencional. Resulta un punto interesante teniendo en cuenta que la dieta actual tiene niveles altísimos de omega 6 y bajos de omega 3, llevando a que consumamos alrededor de 15-20 veces más del primero, cuando lo ideal sería que esa relación sea solo del doble o triple.
Medioambiental
Resulta un tema muy debatido, ya que el impacto medioambiental depende de múltiples factores. Aunque no es mi área de expertise, comparto algunos hallazgos.
A favor de lo ecológico estaría la menor contaminación con metales y la familia de pesticidas sintéticos, menor afectación de la biodiversidad, incremento en la fertilidad del suelo y probable menor utilización de agua. Principalmente se habla de mayor impacto medioambiental en el consumo de animales y sus productos derivados obtenidos mediante producción ecológica (carnes, huevos, leche).
En contra de lo ecológico estaría la utilización de superficies mayores de cultivo, la probable mayor emisión de gases (en discusión, se tienen pocas cifras confiables), y el problema de la contaminación que representa el transporte de productos (como por ejemplo comprar un jengibre orgánico que viene desde Perú, muy saludable pero poco sostenible).
Contaminantes
Aquí se pueden analizar muchas sustancias: antibióticos, hormonas, compuestos sintéticos (herbicidas, pesticidas, fungicidas), metales, y más. Voy a enfocarme solo en algunos.
Los productos ecológicos, por definición, no deben utilizar compuestos sintéticos. Sin embargo, se encuentran residuos de los mismos. Los ecológicos presentan concentraciones 4 veces más bajas de pesticidas que los regulares. Esto se debe probablemente a la contaminación cruzada de los campos convencionales vecinos o a la presencia de pesticidas muy persistentes en los campos (por ejemplo, compuestos organoclorados) de manejo convencional pasado. En productos regulares, es notable que la detección de residuos de pesticidas en frutas es de al menos el doble (75%) que en verduras (32%).
En reemplazo de los compuestos sintéticos se utilizan: fertilizantes orgánicos (como estiércol y compost), el cultivos de leguminosas en rotación (para aumentar los niveles de nitrógeno del suelo) y la aplicación de métodos de protección de cultivos preventivos y no químicos (como el uso de rotación de cultivos, más variedades resistentes/tolerantes, deshierbe mecánico y con llama, y productos biológicos para el control de enfermedades y plagas). De todos modos, las normas orgánicas permiten el uso de determinados extractos vegetales o microbianos y/o productos fitosanitarios minerales (como algunos a base de cobre y azufre).
Aunque no es el objetivo de la nota entrar en detalle, el gran problema de los productos sintéticos es que están asociados con problemas de salud que suelen atribuirse a los famosos “disruptores endócrinos”, o sea sustancias que interfieren con el funcionamiento hormonal del cuerpo y que pueden traer problemas metabólicos, de fertilidad, de neurodesarrollo e incluso cáncer.
En relación a metales y minerales, los productos ecológicos presentan menores niveles de cadmio, nitratos y nitritos. Pero no se encontraron diferencias significativas en niveles de arsénico o plomo. De éstos, el cadmio es el más peligroso, ya que interfiere con el ciclo celular y la replicación del ADN, con consecuencias en todo el cuerpo y asociado a cáncer.
Características Organolépticas
Existen algunos reportes de mejores características organolépticas en productos ecológicos versus regulares. Principalmente en torno al sabor y al olor.
Conclusiones
En relación a las características nutricionales y medioambientales, existen algunos beneficios demostrados que podrían merecer la pena el consumo de productos orgánicos. Siendo las características organolépticas un parámetro subjetivo, quedaría este punto a consideración del bolsillo del consumidor.
Sin embargo, el punto está principalmente sobre los contaminantes. Aunque resulta difícil predecir el beneficio de reducir la exposición a todos los compuestos químicos sintéticos por falta de investigación, el beneficio está claro en relación a algunos compuestos sintéticos particulares (se conocen alrededor de 50 sustancias perjudiciales para la salud) y al cadmio.
Se observaron resultados positivos significativos en estudios longitudinales donde el aumento de la ingesta ecológica se asoció con una menor incidencia de infertilidad, defectos de nacimiento, sensibilización alérgica, otitis media, preeclampsia, síndrome metabólico, IMC alto y linfoma no Hodgkin. Sin embargo, se cree que el estilo de vida saludable de las personas que eligen productos ecológicos podría actuar como “agente confundidor” para valorar el verdadero impacto del consumo (porque per sé tienen hábitos y alimentación más saludable que la población regular que eligen alimentos regulares).
Por supuesto que aún falta investigación y contar con más cifras oficiales al respecto de la producción y consumo de productos orgánicos. Pero es una realidad innegable que al día de hoy ya existe respaldo suficiente para hacer recomendaciones con respaldo científico.
Recomendación
Mi recomendación final como profesional de la salud, basada en la evidencia científica disponible, sería reducir el consumo de productos regulares y reemplazarlos en la medida que cada uno/a pueda por productos ecológicos.
Persiguiendo la alimentación saludable que cada uno/a según sus condiciones particulares pueda acceder, sin caer en objetivos perfeccionistas y/o compulsivos.
Bibliografía consultada:
- “Higher antioxidant and lower cadmium concentrations and lower incidence of pesticide residues in organically grown crops: a systematic literature review and meta-analyses.” Br J Nutr. 2014 Sep 14;112(5):794-811. doi: 10.1017/S0007114514001366. Epub 2014 Jun 26. PMID: 24968103; PMCID: PMC4141693.
- “Organic production enhances milk nutritional quality by shifting fatty acid composition: a United States-wide, 18-month study.” PLoS One. 2013 Dec 9;8(12):e82429. doi: 10.1371/journal.pone.0082429. PMID: 24349282; PMCID: PMC3857247.
- “A Systematic Review of Organic Versus Conventional Food Consumption: Is There a Measurable Benefit on Human Health?” Nutrients. 2019 Dec 18;12(1):7. doi: 10.3390/nu12010007. PMID: 31861431; PMCID: PMC7019963.
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- “Cadmium toxicity and treatment: An update.” Caspian J Intern Med. 2017 Summer;8(3):135-145. doi: 10.22088/cjim.8.3.135. PMID: 28932363; PMCID: PMC5596182.
- https://www.colorado.edu/ecenter/2021/03/17/positive-impact-organic-foods (Visitado el 10/08/2022)
- https://news.climate.columbia.edu/2019/10/22/organic-food-better-environment/#:~:text=Organic%20farming%20is%20widely%20considered,fertilizer%20or%20pesticide%20run%2Doff (Visitado el 10/08/2022)